Preguntas frecuentes

Preguntas frecuentes sobre la incineradora de Valdemingómez

¿Dónde está?

La incineradora está ubicada en el distrito de Villa de Vallecas, al Sureste de Madrid, en el sector 6 de Cañada Real, aproximadamente a medio camino entre el km14 de la A3 y el río Manzanares, con coordenadas 40°20’06.9″N 3°35’58.8″W. Forma parte del llamado Parque Tecnológico de Valdemingómez (PTV), más concretamente en la Planta de Tratamiento de las Lomas.

 

¿Quién la gestiona?

La empresa URBASER, que pertenecía a ACS (Florentino Pérez), pero que en 2016 fue vendida a la firma Firion Investments, que está controlada por el grupo chino Ying Zhan Investment, con sede en Hong Kong. 

¿Cuándo acaba su contrato?

En junio de 2020

¿Desde cuándo funciona? 

La Planta de Las Lomas empezó a funcionar el 1993, entrando en funcionamiento la Incineradora en 1995.

¿Cuánta basura quema? 

La incineradora tiene tres hornos con capacidad para 100.000 t/año cada uno, lo que haría un total de 300.000 t/año. Sin embargo, otra forma de calcular su capacidad es la cantidad de basura que puede quemar diariamente, que son 900 t/día a razón de 300 t/horno/día lo que hace un total de 328.000 t/año. En 2018, la incineradora quemó 328.680 toneladas. Esta cantidad equivale aproximadamente al 27% de los residuos que entran en el PTV

¿Qué se quema en la incineradora? 

La descripción que se hace en la Memoria del PTV es muy vaga, señala que proceden, en su mayoría, de la fracción resto de la recogida domiciliaria y coinciden con lo que denominan rechazos. Es decir, son aquellos materiales que no se recuperan para ser reciclados, ya sea por ser muy caro su tratamiento o porque en su estado es muy difícil reciclar. Según esta descripción estaríamos hablando fundamentalmente de plásticos de distintas densidades no procedentes de envases, envases plásticos de baja densidad como films de embalajes y alimentarios, bolsas, etc pero también, envases de plásticos de densidad media que por su tamaño se caen en las cribas como pasa con los botes de yogures líquidos, por ejemplo. Además otros materiales como skay, maderas, etc… El único documento en el que hemos encontrado una descripción pormenorizada de materiales es la Autorización Ambiental Integrada de la Incineradora de 2008, en la establece que el 32,6% de lo incinerado corresponde a papel impreso, el 24,5% a materia orgánica compostable, un 16,7% a materiales plásticos, un 1 5,8% a materiales textiles y un 4,8% a madera (datos del año 2006).

¿La incineradora genera residuos?

Sí, y lejos de lo que se suele decir públicamente esos residuos han de depositarse en un vertedero, por lo que no es cierto que la incineración sea una alternativa real a los mismos. Los residuos resultantes de la incineración son vertidos líquidos procedentes del lavado de los gases de combusión, chatarras, escorias y cenizas, como subproducto final.

Los residuos sólidos que acaban en vertederos suponen en torno al 10% de lo que se incinera, 3% de escorias, que acaban en un vertedero de inertes y 7% de cenizas en un vertedero especial para sustancias peligrosas situado junto a la incineradora.

¿Qué coste tiene la incineradora?

 El coste total en 2018 de la planta de Las Lomas, que incluye una línea de clasificación y otra de incineración, ascendió a 25.946.902,61 €. El coste medio de la tonelada tratada en esta planta es de 50,47€7t, muy superior a los 39,19€/t de La Paloma o los 28,95€/t de Las Dehesas. Según las tasas municipales de 2019, el tratamiento mediante incineración de una tonelada de residuos cuesta 65,41€ el más caro de todos los tratamientos. De toda la energía eléctrica generada en la incineradora, no se percibe ningún ingreso.

¿Cuáles son las emisiones de la incineradora?

En la combustión que se realiza en la Incineradora de Valdemingómez se emiten distintos gases y sustancias tóxicas como Cloruro de hidrógeno, Monóxido de carbono, Óxidos de nitrógeno, Compuestos orgánicos volátiles (COV), Dióxido de azufre, Fluoruro de hidrógeno, Cadmio y talio y sus compuestos, Mercurio y sus compuestos, Antimonio, arsénico, plomo, cromo, cobalto, cobre, manganeso, níquel, vanadio y sus compuestos, así como contaminantes orgánicos persisitentes (COP) como las dioxinas y los furanos. 

Los datos medidos por el Ayto. en la incineradora de Valdemingómez se publican con cierto retraso en AQUÍ

Si bien las distintas tablas arrojan datos dentro de los límites legales e incluso muy por debajo de estos, hay que tener en cuenta que todos estos datos son de emisiones y no de inmisiones, es decir, de lo que llega al territorio, para las que no hay fijados límites legales. Especialmente preocupantes son los datos de las dioxinas y los furanos, por su característica de persistencia, de manera que el estudio que realizó el Ayto. de Madrid en 2018 midió cantidades de estos contaminantes que triplicaban su valor en el Ensanche de Vallecas frente a las obtenidas en la Calle Montesa del Distrito Salamanca. Teniendo en cuenta que en el Ensanche de Vallecas no hay más transporte ni más calefacciones que en el Distrito Salamanca, la única aportación diferente es la Incineradora, por lo que su aporte en continuo claramente desequilibra la relación con el resto de la ciudad, aportando un factor de riesgo que habría que eliminar.

¿La medición de emisiones es suficiente, es fiable?

El control de las emisiones de dioxinas y furanos se realiza con mediciones mensuales en momentos puntuales, es decir, no se realizan en continuo como con otros compuestos por la dificultad técnica que entraña. Distintas investigaciones han mostrado que los métodos que utilizan medidas puntuales no son capaces de precisar las emisiones de dioxinas a la atmósfera en todo su espectro de condiciones de funcionamiento; si además tenemos en cuenta que la cantidad de dioxinas varía según la naturaleza de los residuos que se estén quemando, no parece suficientemente fiable el sistema empleado. Para obtener una información más precisa sería necesario establecer un seguimiento continuo, en periodos de tiempo lo suficientemente grandes. A todo ello se suma que en los inventarios de dioxinas y furanos de la incineradora no se incluyen mediciones en las escorias y cenizas que se generan como residuo final del proceso de incineración, donde se concentra la mayor parte de las dioxinas.

¿Cuántas incineradoras hay en España?¿Dónde están? 

En España hay 11 incineradoras y otra más en Andorra. Están en Álava, Guipúzcoa, Tarragona, Barcelona (Mataró y San Adriá de Besos), Cantabria, Mallorca, Melilla, Madrid y A Coruña. Se agrupan en una Asociación de Empresas de Valorización Energética de Residuos Urbanos. (AEVERSU)